lunes, 26 de enero de 2015

Abandono, Actividad, Trabajo

La mayor razón del fracaso es el abandono. Seguro que todos hemos escuchado en más de una ocasión “Al que madruga, Dios lo ayuda” bien pues ¿y si es cierto? ¿no sería fácil madrugar todos los días para conseguir nuestros objetivos? pues si pero….
también es muy fácil no madrugar, abandonar. Lo hacemos en todos los aspectos de nuestra vida, incluso con nuestro cuerpo (que por cierto solo tenemos uno y parece que no nos damos cuenta) aplazamos todo. Somos expertos en poner excusas, hoy no puedo, hoy hace frio, hoy calor, hoy echan tal peli en la tele… fíjate que tan sólo los problemas cardiovasculares ocasionan más de mil muertes diarias y que el 90% de los casos es por abandono.
Igualmente pasa con nuestra capacidad para prosperar en el trabajo con nuestra propia actividad. Esta bien eso que dicen muy de moda últimamente de que tengas una mente abierta y positiva. Pero no se llega a la recolecta de la cosecha solo con pensar sembrar, hay que hacerlo.
¿y que tal el descanso? pues el descanso es una necesidad pero no lo conviertas en tu objetivo, descansa lo necesario para recobrar fuerzas y sigue adelante. Sin actividad constante, llega fácilmente la excusa para parar, en cambio si actúas con tesón se convertirá en algo que fluye solo
Las pocas personas que actúan son la envidia de los muchos que se conforman con mirar, no lo dudes.



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